Turismo abarrota zonas de atracción de la zona conurbada.

Danytza Flores .

Veracruz, Ver.- En la recta final de la primera semana de vacaciones se registró un importante movimiento turístico en los diferentes zona turísticas de la zona conurbada Veracruz-Boca del Rio.

El centro histórico en Veracruz, desde temprana hora se ha visto repleto de visitantes que recorren las calles y museos para conocer parte de la historia del municipio.

Sin embargo, uno de los mayores atractivos que está representando para los vacacionistas, son los sacamonedas, una tradición del paseo malecón de Veracruz, en donde por momentos se puede ver el aglutinamiento de familias disfrutando del espectáculo que este grupo de hombres y jóvenes se dedica para obtener el sustento de sus familias.

Tratándose de clavadistas que se lanzan al lecho marino a recoger las monedas que los turistas les lanzan y a cambio les sacan un erizo o estrella de mar para que la conozcan en vivo.

Pero la gastronomía veracruzana tampoco se quedó atrás, pues también se pudo observar una larga fila de turistas en espera de poder ingresar a uno de los cafés más prestigiado y de mayor tradición, donde las familias no se han ido sin probar el tradicional lechero acompañado de una canilla como parte de sus alimentos y su visita a este puerto.

Otro de los atractivos fue la plaza Acuario, que registró una gran cantidad de visitantes, disfrutando de los diferentes atractivos que ofrece al interior como el museo de Ripley, los simuladores virtuales y que decir del aquarium de Veracruz que no paraba el ingreso de familias para conocer las diferentes especies marinas que alberga el lugar y tomarse la foto del recuerdo.

Mientras que locatarios del lugar que en su mayoría oferta ropa de playa y suvenir, tratando de vender con promociones y descuentos, que pese a ello poco se acercaban las familias a adquirirles.

A las afueras sobre el corredor de Villa del Mar la imagen se repetía familias que caminaban por la zona para dirigirse a la plaza acuario o bien a la zona de playas cargados de hieleras, mascotas y sombrillas para aprovechar el último día de la semana mayor.