Constitución de Apatzingán, punto de partida de la consolidación del estado mexicano

Danytza Flores.
Boca del Río, Ver.- El pasado 22 de octubre se conmemoró el 209 aniversario de la promulgación de la Constitución de Apatzingán y el teniente de Materiales de Guerra, Julio Antonio Cortés Bárcenas, perteneciente el 83 Batallón de Infantería, recuerda que se trata del antecedente inmediato de la primera Carta Magna de México, que a pesar de no haber entrado en vigor, significó un paso fundamental en la lucha independentista y contribuyó a sentar las bases para la consolidación del estado mexicano.
Esta constitución fue promulgada por el Congreso del Anáhuac, el 22 de octubre de 1814, en Apatzingán, Michoacán y también es conocida como “la libertad de la América Mexicana”. En ella están contenidas muchas de las ideas del General José María Morelos y Pavón, integrada por 242 artículos y dividida en dos partes: principios o elementos constitucionales y forma de gobierno.
El documento destacaba el reconocimiento de la religión católica, así como los conceptos de soberanía, ciudadanía, igualdad ante la ley y el respeto a la libertad. Pretendía velar por la protección de los pobres a través de la moderación de la opulencia y el aumento de su jornal, que se traduciría en la mejora de sus costumbres, los alejaría de la ignorancia, la rapiña y el hurto.
Su origen fue el movimiento insurgente de 1810 con la necesidad de dar un orden y sentido a la lucha que se desarrollaba para para lograr la independencia de lo que entonces era la Nueva España.
Fue José María Morelos y Pavón, quien hizo el llamado para crear un gobierno independiente y fue este mismo, quien llevó el documento llamado “Sentimientos de la Nación” al Congreso, en el cual declaraba la Independencia total de la América Mexicana y establecía un gobierno independiente con división de poderes, prohibía la esclavitud y la división de la población en castas.
Parte de este texto plantea que los bienes deberían repartirse correcta y justamente de manera que nadie enriquezca en lo particular y todos queden socorridos en lo general.
Pese a las buenas intenciones, debido a los tiempos difíciles en que fue redactada, no fue posible que entrara en vigor; sin embargo, fue uno de los puntos de partida y fuente de inspiración, para la redacción de la Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos de 1824.